En la empresa es similar. Los colaboradores tienen consignas y objetivos en su trabajo. Les toca ser motivados, organizados y competentes para entregar lo que se les pide y conseguir los resultados.
Pocas empresas y personas tienen una cultura de colaboración y respaldo.
Si uno no sabe, pregunta y duda amenudo, se cuestionará rápidamente su profesionalidad.
Solemos evitar preguntar o pedir ayuda demasiado para no mostrar a los demás nuestras posibles debilidades o carencias .Nos pondría en una posición de inferioridad o de perder nuestra credibilidad.
En la cultura empresarial existe otro aspecto crucial: el derecho a fallar. En las culturas latinas el error es un tabú y es considerado un desastre. Al contrario el error puede ser una fantástica oportunidad de aprendizaje y mejora.
En una empresa, aceptar que se puede fallar es dar fluidez y atrevimiento a la organización, es evitar la parálisis.
El derecho a pedir ayuda y el aceptar que se cometan errores aumentan el aprendizaje y la eficiencia para la empresa porque
El derecho a pedir ayuda y el aceptar que se cometan errores aumentan el aprendizaje y la eficiencia para la empresa porque
- Las preguntas y dudas siempre aportan entendimiento y claridad a todos
- Compartir informaciones y procedimientos permite identificar mejores prácticas
- El derecho al error genera flexibilidad, desafío y creatividad.
Pero claro, se deben aplicar con límites, normas y profesionalismo.
- Compartir informaciones y procedimientos permite identificar mejores prácticas
- El derecho al error genera flexibilidad, desafío y creatividad.
Pero claro, se deben aplicar con límites, normas y profesionalismo.
Desde que empecé a trabajar en consultoría y coaching del cambio, utilizo unas reglas sencillas y muy eficientes que para mi combinan las dimensiones humanas y de negocio:
“Tienes derecho a no saber. A todos nos ocurre no saber.
Si necesitas ayuda, pídela.
El error está permitido. Es aceptable fallar.
Pero es prohibido fallar por no haber pedido ayuda.”
Sencillo ¿no? ¿Qué os parece?
Escríbeme a info@autenticoach.com para más información sobre estas preguntas ... o para ver cómo el coaching puede ayudarte en tus desafíos.
“Tienes derecho a no saber. A todos nos ocurre no saber.
Si necesitas ayuda, pídela.
El error está permitido. Es aceptable fallar.
Pero es prohibido fallar por no haber pedido ayuda.”
Sencillo ¿no? ¿Qué os parece?
Escríbeme a info@autenticoach.com para más información sobre estas preguntas ... o para ver cómo el coaching puede ayudarte en tus desafíos.
Me han gustado mucho el dicho de Lao Tse y el miedo que puede sentir un ser humano a hacer errores en su trabajo y, a veces, en su familia.
ResponderEliminarMichel
Muy bueno. El miedo o el afan de aparentar es algo muy arraigado en nuestra cultura. No asi en la anglosajona, sólo hay que ver los foros. Es muy dificil encontrar laboralmente a alguien que diga - no lo sé. Lo apunto y te lo digo.y es muy triste porque cuando acabas los estudios solo hay una forma de aprender: Preguntar. Y el único que no se equivoca es el que no hace nada.
ResponderEliminarLastimosamente hoy en día el hecho de preguntar es entendido como indicativo de ignorancia, cuando debería ser entendido como interés y valentía.
Noa
¡Qué rápidos somos en juzgar a los demás!
ResponderEliminarY cómo, juzgando, limitamos las posibilidades de aprendizaje y de éxito!